

Retos en la sociedad de la información
Mi objetivo con esta charla es que podamos revisar nuestras propias creencias y a la luz de eso determinemos qué componentes del pasado tiene nuestro camino y si es necesario dejarlas atrás o no para adaptarnos a la cambiante realidad. Mi tesis es que tratamos de construir la educación del futuro en paradigmas del pasado porque nosotros mismos como individuos no nos revisamos.
Si me preguntaran qué habilidad considero que es la única de la que deberíamos ocuparnos diría sin ninguna duda “Autonomía” Estoy convencida que si de manera colectiva logramos individuos autónomos, habremos logrado como sociedad, el objetivo.
Y cómo se hace eso, nos preguntamos en Empiricus: Retando de manera permanente la manera en que aprendemos.
Vengo de una familia de clase baja-alta, mi papá pensionado del ICA, mi mamá ama de casa, ninguno de los 2 terminó el bachillerato.
Yo tuve ganas de ir a la Universidad de Antioquia y de estudiar mi maestría en el exterior, aunque hay una serie de variables socio-culturales que pudieron haber incidido, yo atribuyo haberlo hecho a algo más simple, la influencia de mis primeros maestros, ellos, mis papás, nos dejaron, a mi hermana y a mi, SER.
Esto implicaba 3 cosas
1. Pedirnos que nos esforzáramos hasta nuestro máximo
2. Darnos palabras de aliento cuando creíamos no ser capaces o nos equivocábamos
3. Reconocer lo diferentes que éramos y permitirnos decidir lo que queríamos hacer, no lo que ellos consideraban se debía hacer, en realidad ni ellos mismos entendían de lo que nos ocupábamos.
Estos elementos son comunes en la historia de los 3 socios de Empiricus y hace 3 años nos unimos bajo una creencia fundamental, este mundo está lleno de posibilidades para hacer lo que queramos pero el sistema educativo que nos tocó a nosotros está limitando a los chicos de hoy para lograrlo.
De ahí nace la definición de autonomía que promovemos y que cotidianamente nos esforzamos por representar. Para nosotros la autonomía es la capacidad de elegir lo que más nos hace felices como individuos reconociendo nuestro rol en un contexto social. De esta manera, en Empiricus cada uno puede trabajar desde dónde quiera y a la hora que quiera, medimos nuestra dedicación en horas, mantenemos una comunicación activa por correo, chat y teléfono móvil y nos encontramos presencialmente cada mes o cada que alguno de los socios siente que el tema a tratar necesita presencia física.
Retos en la sociedad de la Información
Los 3 nacimos en los 80’s, una época dónde los cambios tecnológicos producidos 15 años antes en el mundo llegaban a Colombia con pleno furor. Crecimos con computadores personales y juegos de video en nuestras casas, nuestros papás (no los míos) iban al cajero automático y el teléfono móvil se lo conocimos al menos a algún amigo. En la Universidad ya podíamos comunicarnos en tiempo real con personas que estaban en otras partes del mundo. El Internet cambió nuestra manera de comunicarnos y esta nueva manera traía consigo una nueva manera de aprender.
Ahora, ¿qué ha cambiado? Las innovaciones son incrementales pero a un ritmo exponencial, ¿qué quiere decir? Que la velocidad del cambio ha aumentado y lo seguirá haciendo a ritmos que aún no podemos dimensionar; el resultado: incertidumbre.
Las nuevas tecnologías nos han llevado a convivir en un mundo donde conversamos con las computadoras. Estamos desarrollando tecnologías para procesar la cantidad de información que se produce Big Data y diseñando máquinas que “aprenden” Machine Learning. Hoy cuando no entendemos algo o no lo sabemos hacer lo buscamos en google y los youtubers tienen más influencia en los jóvenes que cualquier protagonista de novela.
Esta transformación digital permea no solo nuestra perspectiva de las carreras profesionales sino nuestra relación con el trabajo, un informe de McKinsey (Independent work: Choice, necessity, and the gig economy) Afirma que entre un 20% – 30% de la población en Estados Unidos y Europa son empleados independientes.
Cómo propone Empiricus abordar estos retos
Aplicando ejercicios de pensamiento algorítmico con 900 chicos y chicas entre 14 años y 28 años, independiente de su nivel de conocimiento, nos dimos cuenta que plantearles un reto era una buena manera de invitarlos a solucionar un problema y que cada problema resuelto les daba motivación para continuar. Identificamos dos temores en los adultos responsables (me incluyo) no saber la respuesta y que los chicos a la primera no entendieran el concepto. El resultado de este ejercicio fue reconocer la importancia de 3 elementos: aprender haciendo, complejidad progresiva y tolerancia frente al error, alrededor de algo que consideramos clave: La autonomía. En Empiricus promovemos el trabajo individual y entre pares a partir de una aplicación práctica, con apoyo de la tecnología tanto dentro como fuera del aula de clase
1. Aprender haciendo
Enfocarse en el desarrollo de la habilidades y usar el contenido como una excusa. Nosotros particularmente creemos que una habilidad muy importante es resolver problemas y eso se logra practicando, por eso diseñamos ejercicios prácticos que puedan ser usados dentro y fuera del aula a través de una plataforma web.
2. Complejidad progresiva
Reconocer las características particulares de cada uno de los individuos implica diseñar retos que van aumentando gradualmente en dificultad de tal modo que cada estudiante avance a su propio ritmo. Esto además permite equilibrar la frustración y el aburrimiento.
3. Tolerancia frente al error
Error, que en otras palabras sería no atinarle a la primera. Castigar no atinarle a la primera es uno de los mayores limitantes del ambiente simulado que crean las escuelas pues dista mucho de lo que sucede en la realidad. Uno aprende de los errores, aquí la pregunta sería cómo orientamos para que haya una reflexión sobre las razones del error y podamos tomar decisiones diferentes en el próximo intento.
CONCLUSIONES
- En un mundo sobrecargado de información es importante desarrollar habilidades que te permitan hacer uso eficiente de la tecnología
- Los adultos responsables (maestros, padres, directores) debemos confiar en la capacidad de cada individuo de desarrollar las habilidades, respetando su ritmo.
- Reconocer los avances y brindar pistas para la solución de un problema pequeño alientan el interés y la confianza de los estudiantes.
- Es necesario cuestionar de manera permanente las bases sobre las que sustentamos nuestras acciones dentro de la organización pues esto terminará repercutiendo en la propuesta educativa.